En el universo escondido e inmutable de mi profundo silencio, me hice una pregunta ... y en tu profundo silencio parece que he encontrado respuesta.
Basta con admirar la puerta azul de tus silencios, aquella que nunca miente, aquella que siempre guardas. Basta con recorrerla, para comprender que encierras algo más profundo, y más inmenso que la extensión misma del mar.
Desearía ahogarme lentamente en sus enigmaticas olas, y entre las corrientes cálidas de tus pensamientos, para con ello captar los ecos de lo que tus labios nunca se atreven a pronunciar.
Tus recuerdos son como una caudalosa brisa, que me envuelve entre los susurros ahogados del mar de tus silencios y el oceano cálido de tu esencia. Aquellos recuerdos que se anhelan cuando el camino es cuesta arriba y te toca ir a pie, los mismos que tu silencio mantienen atados en lo mas profundo de tu ser.
Y me sigo preguntando si la puerta has de abrir, si quizás he de saberlo antes de dejar tu puerto, antes de invitablemente partir.
COL
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